DESARROLLO HUMANO Y SOSTENIBILIDAD EN ENTORNOS COMPLEJOS
Al hablar del Desarrollo
Humano y Sostenibilidad en Entornos Complejos, debo indicar que es una temática
por demás interesante, extensa y compleja que aglutina diversas posturas,
paradigmas y visiones del ser humano.
A este propósito, Send (2000); PNU (2000), quienes
señalan que la nueva perspectiva para comprender parte de la dimensión del
desarrollo humano gira alrededor de: 1) ampliar las opciones a los individuos
aumentando las funciones y capacidades humanas, 2) impulsar los niveles de
desarrollo a través de sus capacidades a saber: a) que las personas vivan una
vida larga y saludable, b) tengan conocimientos y acceso a los recursos
necesarios, c) que el humano tenga un nivel de vida decente, d) participación
de todos los humanos por igual, e) seguridad desde todos los ámbitos, f)
sostenibilidad, g) garantías de los derechos humanos, h) solidaridad entre
humanos, i) concientización hacia el cuido de los recursos naturales y la madre
tierra. En suma, para que se pueda apreciar el verdadero desarrollo humano las
gobernanzas de las naciones deben pensar en el bienestar del colectivo
apartándose de las individualidades, deslastrándose del poder, los flagelos
sociales que consumen al humano. En fin, los individuos debemos pensar en: la
continuidad de la humanidad con humanidad, haciendo uso de los
principios éticos (raciocinio, conciencia, solidaridad) con sus semejantes.
De igual modo, el desarrollo humano debe ser sostenible,
porque los humanos tenemos la misión de ser capaz de satisfacer las necesidades
de las generaciones actuales sin comprometer la capacidad y las oportunidades
de las generaciones futuras. La opinión antes
descrita, es desde una visión de conjunto, que integra las dimensiones:
cultura, ética, factores externos (económicos, políticos, social, educativo,
tecnológico) y el elemento ecológico.
En ese sentido, el paradigma del desarrollo humano
sostenible apunta a los siguientes puntos: a) orientar los fines y supedita los
medios, b) propone el acceso justo, sin discriminación, de las personas a las oportunidades,
c) no se limita a la dimensión meramente económica, sino que parte de una
visión holística donde se integra lo político, lo cultural y lo social.
Fuentes:
Morin, E.; Ciurana, E; y Mota, R. (2003). Educar en la era Planetaria. Gedisa,
ediciones.
PNUD (2000- 2001).
Informe Desarrollo Humano.
Sen, A. (2000) (2001). Desarrollo y Libertad. Bogotá.
Planeta.
Sen, A. Klisksberg, B. (2007). Primero la Gente. Una
mirada a la Ética del Desarrollo desde los Problemas del Mundo Desarrollado.
Barcelona. Ediciones Deusto .